Ya que el nombre de Roberto Clemente es tendencia desde anoche por la controversia que se ha generado en torno a unos cargos que está cobrando el Departamento de Transportación y Obras Públicas a los dueños de automóviles que van a renovar marbetes, y esto para una alegada recolección de fondos para la Fundación Roberto Clemente, vale la pena poner en récord por qué se ha elegido este año para celebrar la vida del expelotero con un marbete que lleva su imagen y la creación de una tablilla especial igualmente en su honor.

Resulta que la causa más obvia es que en este 2022 se conmemoran 50 años de la muerte del Astro Boricua. Clemente falleció un 31 de diciembre del 1972 cuando un vuelo de carga al que abordó en el aeropuerto Luis Muñoz Marín en Carolina se estrelló en el norte de Puerto Rico. El jugador de Carolina pretendía llevar en persona ayudas que él había pedido al pueblo de Puerto Rico para ayudar a Nicaragua, país que había sufrido semanas antes un terremoto y a donde unas previas ayudas que él envió alegadamente habían sido mal manejadas por el gobierno nicaragüense y no estaban llegando a la gente común del país.

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Fue una tragedia sobre una tragedia. Puerto Rico perdió a uno de sus más grandes ídolos de aquel entonces y todavía hoy el más grande pelotero que ha dado Puerto Rico; el único que ha conectado 3,000 hits y el primer de cinco que han sido exaltados al Salón de la Fama del Béisbol.

Pero si bien lo que más recordamos es que se conmemoran 50 años de su muerte, hay otros elementos de la vida deportiva de Clemente que también cumplen 50 años en el 2022. Algunos son obvios. Participó en su último Spring Training y jugó su última temporada en las Grandes Ligas.

Otros son igualmente históricos. Por ejemplo, el 30 de septiembre se cumplirá medio siglo del día en el que le conectó un doblete a Jon Matlack, de los Mets de Nueva York, para convertirse en el primer latino y 11mo jugador en la historia de las Grandes Ligas en llegar a los 3,000 hits. Fue, vale recordar, el último hit de su carrera en temporada regular ya que los Pirates de Pittsburgh, que eran campeones defensores de la Serie Mundial avanzaron ese año a los playoffs, pase que de paso aseguraron un 21 de septiembre.

Un mes antes que eso, el 30 de agosto, igualó a Honus Wagner en la historia de los Piratas como el líder de todos los tiempos de la franquicia en hits conectados con 2,970. El 2 de septiembre quebró ese empate con un jonrón de tres carreras ante Sam McDowell de los Giants de San Francisco. Y luego el 3 de octubre, en el que sería su último juego de temporada regular, Clemente igualó a Wagner en el récord para la franquicia como el jugador con más juegos jugados en la historia en uniforme de los Piratas. Al día de hoy Clemente conserva el liderato de la franquicia en hits y está empatado con Wagner en el renglón de más juegos jugados, entre otros récords.

El último juego de Clemente oficialmente, fue un 11 de octubre. Era un quinto y decisivo partido por el campeonato de la Liga Nacional. Un jonrón de Johnny Bench en la parte baja de la novena entrada empató el juego a 3-3. Poco después un lanzamiento salvaje del relevista Bob Moose permitió que George Foster entrara en carrera para enviar a los Reds de Cincinnati a la Serie Mundial y a Clemente a sus vacaciones de postemporada.

Momentos trascendentales en la brillante carrera de Roberto Clemente

Fueron unas vacaciones en la que Clemente dirigió al Equipo Nacional de Béisbol de Puerto Rico en la Serie Mundial Aficionada en Nicaragua, celebrada a mediados del mes de noviembre. El boricua ya había conocido a Nicaragua antes, cuando dirigió también a Puerto Rico en una serie internacional durante el invierno del 1963 y 1964. Con ese afecto por Nicaragua, Clemente no dudó en movilizar a Puerto Rico reunir ayudas para enviarlas a Nicaragua luego que el 23 de diciembre de ese año una serie de terremotos que causaron devastación en la capital nicaragüense, Managua. Según reportes inmediatos en aquel momento, 18,000 nicaragüenses murieron y 300,000 quedaron desprovisto de un hogar. El 70 por ciento de la ciudad quedó en ruinas.

Por último, en términos relacionados a MLB, Clemente ganó su 12mo Guante de Oro un 25 de noviembre. Y en términos de béisbol en general, un 27 de diciembre realizó una clínica de béisbol para 300 niños y jóvenes en Aguadilla, Puerto Rico. Según un reporte de United Press International de esos tiempos, en la clínica hizo una demostración de bateo de cinco lanzamientos, siendo su último batazo un jonrón. Sería bastante seguro, el último swing que hizo en su vida.

Llegó entonces el 30 de diciembre. Clemente supervisó el envió de tres aviones de cargas a Nicaragua.

Y el 31, luego de recibir reportes que las ayudas no estaban llegando al pueblo abordó el fatídico vuelo que lo convirtió en leyenda inmortal.