Nueva York. Freddie Roach, entrenador de Miguel Cotto, anticipó que su protegido no debe aumentar más de cinco libras para el combate de esta noche contra Sergio “Maravilla” Martínez. El púgil puertorriqueño marcó 155 libras en la ceremonia oficial, justa la cantidad que Roach.   

“Quería que Miguel se mantuviera bajo en el peso por la factor velocidad que será más importante que la fortaleza. Todos pudieron ver que se encuentra en excelentes condiciones físicas”, sostuvo Roach minutos después de concluir los pesajes.

Martínez, por su parte, detuvo la báscula en 158.75 libras, un cuatro de libra por debajo del peso acordado de 159. Sin embargo, Roach señaló que, a su juicio, el argentino tuvo dificultades para perder el exceso de libras.

“Vi (a Martínez) salir del sauna como cinco veces durante la semana y también la noche antes así que confrontó para hacer el peso. A Miguel le di el día del jueves libre para que se relajara, se siente fresco y listo para la pelea”, explicó Roach.

Cotto, mientras tanto, aseguró que el peso nunca fue un factor durante el campo de entrenamiento.

“Trabajé cómodo, sin el peso en mente y fue el que dimos”, dijo el cagüeño mientras disfrutaba de una ensalada de frutas después de pesarse. “El cuerpo adquiere las libras que entiende que necesita. Estoy muy  bien y ahora lo que resta es trabajar. El sábado será una gran noche puertorriqueña”, agregó.

En otros combates, Wilfredo Vázquez Jr. y Marvin Sosona marcaron 125.8 libras. El pleito será por la faja NABF del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). Además, Jorge Meléndez pesó 153 libras, mientras que su oponente, el argentino Javier Maciel, hizo lo propio en 154 libras.

Por el resto de los puertorriqueños que estarán en acción, Félix “Diamante” Verdejo y Engelberto Valenzuela registraron 134. 5 libras; José “Wonder Boy” López marcó 121.4 libras, mientras tanto Raúl Hidalgo pesó 122.2 libras. Finalmente, el debutante Jantony Ortiz detuvo la báscula en 113.4 libras y su rival Elio Ruiz en 112.2 libras.