La puertorriqueña Madison Anderson Berríos siempre se ha visualizado como una reina de belleza. Y esa misma proyección es uno de los muchos atributos que ha logrado conquistar el favor de los missiólogos, que la incluyen entre las preferidas para ganar la corona como Miss Universe 2019.

Desde su coronación en junio, cuando concursó por el pueblo de Toa Baja, la beldad puertorriqueña ha sido enfática en cuánto se vive cada instante dentro de la experiencia como Miss Universe Puerto Rico (MUPR), y su anhelo de traer la sexta corona en el certamen, que se realizará hoy a las 8:00 p.m. (hora de Puerto Rico) en Atlanta, Georgia. 

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La ilusión de lucirse en este ámbito la conquistó desde infancia, cuando estaba familiarizada con las coronas que ganó su madre, Belinda, quien ostentó varios títulos, incluyendo el de Miss Teenage Puerto Rico 1984.

“Ella tenía varias coronas, pero yo las destruí todas porque para mí eran juegos, y eso me llevó regaños”, confesó entre risas en una entrevista en septiembre con Primera Hora.  “Desde ahí yo quería ser una reina, hacer la diferencia, y ser la mujer como es mi mamá, a quien admiro”, agregó entonces sobre su progenitora, natural de Isabela.

Dentro de su experiencia, la hija del norteamericano Adam también ha enfrentado críticas por quienes cuestionan sus raíces boricuas, lo que Madison, quien nació en Orlando, Florida, ha debatido.

“Me siento tan orgullosa”, dijo, “porque tú no necesitas nacer aquí en Puerto Rico, ni hablar español perfectamente, para ser puertorriqueña. Para ser puertorriqueña es que lo llevas en la sangre, tienes tu cultura, tus tradiciones, y más importante, amor por tu patria en tu corazón”, expresó al día siguiente de ser coronada, tras enfrentar los abucheos la noche de la competencia final de MUPR. 

La beldad de 5’ con 10” de estatura, quien inició estudios en mercadeo y relaciones públicas, ha compartido su interés en hacer una diferencia, no solo como inspiración para cumplir los sueños, sino también para servir a la comunidad. “Me gustaría combinar mi pasión por las comunicaciones con mi trabajo social. He participado en la creación de documentales dirigidos a concientizar sobre problemas sociales tales como la violencia doméstica”, manifestó a través del perfil compartido por MUPR.

Incluso, el pasado martes, cuando mundialmente se reconoció como el Giving Tuesday, Miss Universe Puerto Rico compartió una imagen en su Instagram para levantar conciencia sobre los niños nacidos con el labio o el paladar hendido, también conocido por labio leporino.

Por otro lado, la reina de 24 años reveló que “una vez concluidos mis estudios, me gustaría dirigir mi propia empresa. He visitado los cinco continentes, aprender sobre diferentes culturas es una de mis más grandes pasiones”.

Madison, quien logró deslumbrar durante la competencia de trajes típicos con la creación del diseñador y artista plástico Joshuan Aponte, inspirado en la flor de maga y el coquí, ha sido enfática en su compromiso para llevar la mejor impresión y obtener el cetro internacional.

“Me siento un poquito ansiosa, pero me siento demasiado ready, lista para hacer un excelente papel para Puerto Rico y ganar esa sexta corona”, dijo a horas de partir de Puerto Rico hacia Atlanta, el pasado 29 de noviembre. Sobre los atributos a su favor para ganar, resaltó “mi personalidad, mi esencia. Soy una mujer auténtica y creo que eso me va a ayudar”.

Su compromiso en dar lo mejor ha quedado claro en su desempeño hasta ahora. La noche del viernes logró cautivar y sobresalir entre otras 89 candidatas con su dominio de la pasarela durante el desfile de gala, y el segmento de traje de baño.

La final del concurso de belleza será el domingo 8 de diciembre en Atlanta, Georgia.

Si bien su anhelo está puesto en ganar, desde ya valora la ganancia de sus vivencias dentro de la competencia, independientemente del resultado. “Ha sido una experiencia maravillosa”, reveló en otra ocasión a Primera Hora. “Cada día estoy creciendo no solo como Miss Universe Puerto Rico, sino como persona. Creo que es una de las cosas más bonitas de esa experiencia, para el resto de mi vida. Estaré por siempre en la historia de Puerto Rico como una miss y me emociona decir eso”.