El método japonés de limpieza con solo 5 pasos que promueve el bienestar y el orden en el hogar
Promueve un estilo de vida ordenado través de la acción y el enfoque.

PUBLICIDAD
La limpieza en Japón va más allá de una tarea doméstica: es un acto cultural y espiritual enfocado en crear armonía, orden y bienestar. Esta práctica se fundamenta en el minimalismo, el respeto por los objetos y una visión integral del entorno como reflejo del estado mental. El método japonés de limpieza se compone de dos pilares principales: el Oosouji y la filosofía de las 5S.
Oosouji: la gran limpieza
Oosouji, que significa “gran limpieza” en japonés, es una práctica tradicional que se realiza a finales de cada año en hogares, oficinas y centros escolares. Su objetivo es iniciar el nuevo ciclo libre de cargas físicas y emocionales.
Relacionadas
Durante el Oosouji, se vacían cajones y muebles, se limpia a fondo cada rincón del hogar y se desechan objetos innecesarios. Además de eliminar suciedad, esta práctica busca cerrar pendientes y dejar atrás todo lo que no aporta, en una especie de renovación simbólica y funcional del espacio personal.
Esta limpieza profunda también está acompañada de una recomendación clave: mantener el orden a diario. Para ello, se divide el hogar en pequeñas áreas y se destinan unos minutos diarios a su organización, lo que evita la acumulación de desorden.
Las 5S: cinco pasos para mantener el orden
La segunda parte del método japonés de limpieza se basa en la filosofía de las 5S, un sistema originado en el ámbito laboral japonés que ha sido adaptado al entorno doméstico. Estas son sus cinco etapas:
- Seiri (clasificar): eliminar lo que no se necesita ni se utiliza. Se trata de preguntarse si cada objeto es realmente útil o si ha perdido su función.
- Seiton (ordenar): organizar los elementos necesarios de manera que sean fácilmente accesibles. Cada cosa debe tener un lugar definido para optimizar el tiempo y el espacio.
- Seiso (limpiar): mantener el ambiente limpio en profundidad. No solo se trata de quitar el polvo, sino de crear un entorno visualmente despejado y funcional.
- Seiketsu (estandarizar): establecer normas y rutinas para conservar la limpieza. Esto implica aplicar métodos constantes que prevengan la acumulación de desorden.
- Shitsuke (disciplina): fomentar la autodisciplina para seguir aplicando las 5S diariamente. La constancia es fundamental para mantener un entorno armonioso.
El método japonés no busca crear espacios vacíos, sino entornos funcionales, armoniosos y libres de elementos innecesarios. A través de la acción física de limpiar y el enfoque mental del desapego, se promueve un estilo de vida ordenado que impacta positivamente en el bienestar emocional.
Este enfoque ha trascendido fronteras y ha encontrado eco en países como México, donde cada vez más personas adoptan estas prácticas como una forma de mejorar su calidad de vida a través del orden, la limpieza y la simplicidad en el hogar.