Dallas. El servicio de Southwest Airlines parecía regresar a la normalidad el martes luego de haber cancelado casi 2.400 vuelos en tres días.

Para la tarde del martes, la aerolínea estadounidense había cancelado menos de 100 vuelos, o el 2% de su programa, según el servicio de monitoreo FlightAware. Más de 400 vuelos iban con retraso.

Southwest sostiene que las cancelaciones y retrasos se debieron al mal clima y a problemas con controladores aéreos en Florida el viernes. La crisis tocó fondo el domingo cuando Southwest canceló más de 1,100 vuelos, el 30% de su plan.

“Siempre que hay retrasos toma unos días hasta regresar a la normalidad”, indicó el CEO de Southwest, Gary Kelly, el martes al canal CNBC. “Estuvimos sumamente atrasados el viernes”.

Relacionadas

Casey Murray, presidente del sindicato de pilotos de Southwest, culpó a la aerolínea por no planificar con antelación. Dijo a The Associated Press que la manera en que se hacen los horarios hizo difícil lograr reemplazos e hizo que un pequeño inconveniente se convirtiera en una crisis.

Southwest, con sede en Dallas, ya había reducido la cantidad de vuelos ofrecidos en el otoño tras una gran cantidad de cancelaciones y demoras en el verano. La aerolínea pensó que esa medida ayudó, pero la crisis le está llevando a considerar más reducciones para noviembre y diciembre.

Los problemas comenzaron poco después de que el sindicato pidió a los tribunales bloquear la orden de Southwest de que sus 9.000 pilotos estuvieran vacunados contra el COVID-19. El gremio sostiene que la compañía tiene que negociar mandatos de ese tipo.

Tanto Southwest como el sindicato han negado versiones de que la crisis se debió a una protesta de empleados. Tanto Kelly como Murray indicaron que el número de ausencias por enfermedad el fin de semana fue normal, si bien no divulgaron la cifra.