El director de la oficina del representante Guillermo Miranda Rivera, Francisco "Paco" Cruz Rivera, había sido referido al Contralor y a la Oficina de Ética Gubernamental por un supuesto esquema de corrupción mientras era secretario municipal, denunció hoy la alcaldesa de Morovis, Carmen Maldonado González.

"La corrupción en esa oficina inició con el cuatrienio, pues el director que Miranda nombró, Francisco 'Paco' Cruz Rivera, ya había sido referido por Ética y el Contralor. Aún sabiéndolo, lo puso a manejar todo en su oficina", apuntó la alcaldesa.

La funcionaria indicó que Cruz Rivera fungió como secretario municipal de Morovis durante la administración del exalcalde Heriberto "Herito" Rodríguez.

Relacionadas

Sobre el caso que señaló la alcaldesa, un informe de auditoría de la Oficina del Contralor reveló que en Morovis presuntamente hubo un cuadro de corrupción en el otorgamiento de contratos de mantenimiento de piscinas.

Maldonado González dijo que dicho esquema se descubrió porque tenía las mismas características de otro caso que ocurrió en la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez.

"No es casualidad que ayer jueves en la noche, el legislador novoprogresista (Miranda Rivera) radicó una querella por fraude contra una empleada no identificada, tratando quizá de desviar la atención. Pienso que Miranda debió añadir en la querella al director de su oficina, quien supervisa a los empleados", destacó Maldonado González, haciendo referencia a la queja que el representante puso en la Policía por un supuesto fraude por parte de una empleada.

"A fin de cuentas, el principal responsable de todo este esquema que ha llenando de vergüenza al distrito representativo que comprende Morovis, Manatí, Vega Alta y Vega Baja, es Guillermo Miranda", sostuvo la alcaldesa.

Miranda Rivera enfrenta una querella en la Comisión de Ética de la Cámara de Representantes, radicada por la empleada Ivette Sierra Vivas.

Sierra Vivas alega que fue despedida del puesto que ocupaba de técnica en la Comisión de Educación, por no aportar $40 de una rifa para la reelección del representante. La rifa tenía como premio un televisor de 55 pulgadas.

Después de no comprar la rifa el pasado mes de junio, Cruz Rivera le indicó a Sierra Vivas que comenzaría vacaciones hasta nuevo aviso, según se desprende de la querella de Ética.