El comisionado designado del Negociado de la Policía Puerto Rico (NPPR), Antonio López Figueroa, ascendió hoy póstumamente al rango de sargento al agente Luis A. Marrero Díaz, de 43 años, por su acto de heroísmo al ofrendar su vida a cambio de la seguridad de la ciudadanía durante un enfrentamiento con un gatillero que también asesinó a los policías municipales de Carolina Luis X. Salamán Conde y Eliezer Hernández Cartagena.

Marrero Díaz laboró en el NPPR durante 19 años y estaba asignado al precinto turístico de Isla Verde del área policíaca de Carolina, donde laboró como motociclista.

El comisionado del Negociado de la Policía, Antonio López Figueroa, ascendió a Luis Marrero Díaz, de 43 años, al rango de sargento por su acto de heroísmo al ofrendar su vida a cambio de la seguridad de otros, durante un enfrentamiento con un gatillero que también asesinó a los policías municipales de Carolina Luis X. Salamán Conde y Eliezer Hernández Cartagena.
El comisionado del Negociado de la Policía, Antonio López Figueroa, ascendió a Luis Marrero Díaz, de 43 años, al rango de sargento por su acto de heroísmo al ofrendar su vida a cambio de la seguridad de otros, durante un enfrentamiento con un gatillero que también asesinó a los policías municipales de Carolina Luis X. Salamán Conde y Eliezer Hernández Cartagena. (Suministrada)

“Luis en este momento en el cielo debe estar hablando con Dios, dándole las gracias por tener una madre, maestra de vocación y a su padre Ángel Luis, bombero, dándole las gracias primero por inculcarle el amor a Dios, segundo el amor al prójimo y el tercer a servir a su país. Hoy María Luisa te digo que tienes un hijo en el cielo y tienes ahora 12,000 en la Policía de Puerto Rico, que nunca te van a abandonar… Hay que hacer honor a quien honor merece”, culminó diciendo López Figueroa al ascenderlo al rango de sargento en presencia de su progenitora María Luisa Díaz y de sus tres hijas, Jheylimar, Yailianne y Marianell Marrero Román.

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El gobernador Pedro Pierluisi Urrutia, quien ayer asistió al velorio, extendió hoy por escrito su mensaje de pésame a sus familiares, amigos y compañeros del NPPR.

La ceremonia se llevó a cabo en el estacionamiento de la funeraria Díaz en Toa Alta con la participación del secretario del Departamento de Seguridad Pública (DSP), Alexis Torres, y los jefes de los negociados que lo componen, junto a la alta oficialidad y decenas de uniformados activos y retirados que acudieron a rendirle tributo.

Ceremonia de honores póstumos en memoria al agente caído en cumplimiento del deber

Posted by Axel Valencia on Friday, January 15, 2021

Torres describió el momento como un “día triste y trágico para la seguridad del pueblo de Puerto Rico. Puerto Rico sufre y está de luto, ese día nuestros oficiales del orden público enfrentaron la violencia y se enfrentaron a un delincuente sin respeto por la vida” y se comprometió a equipar al NPPR con mejores recursos en su lucha contra el crimen.

También dirigió un mensaje a los criminales para que eviten el derramamiento de sangre de los inocentes.

“A los delincuentes le digo que estamos pendientes, que estamos vigilantes. No hay necesidad de tirarle a ciudadanos que no tienen que ver con sus asuntos”, dijo.

Se unieron a este homenaje el alcalde de Carolina, José C. Aponte, quien también enfrenta el luto por el crimen de dos policías municipales; el de Toa Alta, Clemente “Chito” Agosto, donde nació y vivió el sargento; y el de Dorado, Carlos López, municipio en el que jugó pelota Doble A.

“Yo estoy aquí en representación de todos los carolinenses para darles a ustedes mi más sentido pésame para decirle que comprendo su dolor y pedirle al Dios todopoderoso que los colme de fortaleza y paz”, exclamó Aponte.

Mientras, López sostuvo que “su pasión por el servicio público no tenía límites”.

La hermana del agente, Haymee Marrero Díaz, con la fe y el estoicismo que ha caracterizado a su familia durante este proceso tan doloroso, agradeció las muestras de solidaridad y les pidió a los miembros del NPPR que se cuiden.

“Nosotros somos una familia que gracias a la bendición de Dios nos mantenemos en perseverancia y fuertes... queremos agradecerles por todas las muestras de cariño para nuestro querido Luisito, nosotros sabíamos que lo querían mucho, porque era imposible que Luis fuera al pueblo y llegara a casa antes de dos horas, todo el mundo tenía algo que decirle… pero jamás pensamos que fuera tanto el afecto”, dijo.

El pase de lista, los disparos de salva, el toque en trompeta de la pieza musical del Taps, el minuto de silencio, la lluvia de pétalos de flores desde el helicóptero del Negociado de Fuerzas Unidas de Rápida Acción (FURA), arrancaron las lágrimas y el desconsuelo en sus familiares, quienes al final recibieron las banderas de Puerto Rico y Estados Unidos como lo establece el protocolo.

Luis Marrero Díaz, de 43 años, fue ascendido al rango de sargento por su acto de heroísmo al ofrendar su vida a cambio de la seguridad de otros, durante un enfrentamiento con un gatillero que también asesinó a los policías municipales de Carolina Luis X. Salamán Conde y Eliezer Hernández Cartagena.
Luis Marrero Díaz, de 43 años, fue ascendido al rango de sargento por su acto de heroísmo al ofrendar su vida a cambio de la seguridad de otros, durante un enfrentamiento con un gatillero que también asesinó a los policías municipales de Carolina Luis X. Salamán Conde y Eliezer Hernández Cartagena. (Suministrada)

El agente fue sepultado en el cementerio municipal Fuente de Luz, en Toa Alta.

En la balacera resultó herido en una pierna el agente Ángel L. Colón Guevara, quien fue dado de alta ayer y asistió hoy a despedir a su compañero. Durante los actos oficiales también se le rindió respeto mediante un extenso aplauso.

Los hechos que mantienen consternados al país se iniciaron a eso de las 3:50 p.m. del lunes, cuando policías municipales acudieron a investigar un accidente de tránsito en la carretera PR-3 y el conductor de un vehículo Hyundai Tucson, azul, fue visto abandonando la escena hacia la calle Severo Quiñones, donde sacó de un bulto un rifle AK-47 y disparó.

El delincuente alcanzó al policía municipal Salamán Conde, de 30 años, a quien remató. El conductor de una guagua ajeno a lo que estaba sucediendo impactó al sospechoso mientras intentaba esquivar el tiroteo.

El individuo se levantó del pavimento y al no poder huir en una motora de la policía municipal, cometió un “carjacking” apropiándose de un vehículo Hyundai Accent, blanco, del 2003.

Durante la persecución, a la que se unieron agentes estatales y continuó por la avenida Román Baldorioty de Castro, el gatillero abrió fuego contra otros agentes frente al hotel Embassy Suites, en Isla Verde, quienes intentaron bloquearle el paso, los cuales repelieron la agresión.

A Hernández Cartagena le disparó y lo atropelló, y abrió fuego contra los policías estatales que se unieron en ese momento.

El vehículo fue ocupado posteriormente en la calle Júpiter cerca de la entrada que conduce al residencial Luis Lloréns Torres, en Santurce, el cual fue ocupado temporeramente en busca del asesino.

Durante la madrugada siguiente, el cadáver baleado de un hombre con un rótulo de cartón que leía: “Yo soy el responsable del asesinato de los guardia(s). Aquí está”, fue localizado en la calle San José, intersección con la calle marginal, cerca del residencial San Juan Park, en Santurce.

El occiso con amplio expediente criminal fue identificado como David E. Rivera Bátiz, de 25 años y residente en Ponce, quien se hospedaba en Santurce, vinculado con la organización criminal conocida como las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cantera (FARC) y sospechosa de media docena de asesinatos.

La investigación continúa abierta.