El centro de cuido adonde se supone llegara ayer un infante que falleció en el interior de un auto -luego de que a su padre se le olvidara llevarlo hasta allí- podría enfrentar desde un plan de acción correctiva hasta la pérdida de la licencia.

La secretaria del Departamento de la Familia, Glorimar Andújar, dijo que investigan si el centro Pasitos de Futuro, que se estableció en el 2006 y atiende a 22 menores entre el año y medio y los tres años, cumplió con el protocolo de llamada preventiva que establece que a la media hora de que un menor no haya llegado a un centro, la entidad llame inmediatamente a los padres para ver que pasó.

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La información que tiene Familia es que la llamada a los padres no se dio en la mañana de ayer, aunque sí ocurrió otro modo de comunicación.

“Ahora mismo estamos en proceso de verificación si en efecto ese centro de cuido siguió a no siguió el protocolo. Preliminarmente la información que hay es que no hubo una llamada como tal, si no otro mecanismo de comunicación (tienen que mostrar evidencia) y por eso las áreas pertinentes están ahora mismo investigando”, sostuvo Andújar.

Aceptó que un centro “no se libera de su responsabilidad meramente enviando una comunicación sin verificar que esa comunicación llegó”.

Si los padres no contestan la llamada inicial, el centro tiene que llamar a las otras personas que esa familia dejó para ser alertadas en caso de una emergencia, según lo establece la Ley Número 196 del 2018.

Además de una llamada, se puede enviar un mensaje de texto o un correo electrónico.

Si aun así no hay respuesta, entonces hay que notificar a las autoridades.

La funcionaria dijo que depende de los hallazgos de la investigación, el centro enfrentaría medidas “que pueden ir desde establecer un plan de acción correctiva hasta la suspensión y la revocación de la licencia para operar”.

Sobre la posibilidad de que el centro enfrente la sanción más fuerte, perder la licencia, ya que hubo una muerte, la secretaria dijo que en esos casos son más rigurosos.

“En este caso en particular esto desembocó en la trágica muerte de un niño. En ese sentidola agencia es bien rigurosa en la aplicación y máxime cuando hay situaciones donde se ve afectado un menor; pero tenemos que esperar a que finalicen las investigaciones  a cargo del área de Maltrato Institucional y del área de Licenciamiento”, explicó.

A la pregunta de qué está haciendo Familia para velar que los 595 centros de cuido que hay en la Isla cumplan con el protocolo vigente, Andújar respondió que realizan “tanto visitas coordinadas como visitas sorpresas” en las que el personal de Licenciamiento se asegura que cada uno “tenga un plan de emergencia y dentro de ese plan el protocolo de activación de llamadas”.

La funcionaria aceptó que cuando se dan situaciones como estas toman en cuenta que “son áreas que tenemos que retomar y tenemos que verificar la efectividad de cada una de las intervenciones que se realiza”.

De igual forma, reconoció que “esta es una responsabilidad de muchas partes. Es importante que aquellos padres que tienen hijos en estos centros y ha habido alguna situación particular de que el menor no haya ido y no recibieron esta llamada, que avisen a la agencia para nosotros verificar cada unos de los centros y asegurarnos que estén cumpliendo con ese protocolo”.

La agencia, dijo la funcionaria, tiene estadísticas de todas las intervenciones que se hacen y sus consecuencias pero aun así “hay espacio para mejorar”.

A preguntas de Primera Hora de qué haría diferente para ayudar a que no se den estos lamentables incidentes, Andújar respondió que “unos de los aspectos importantes es asegurar que en cada una de estas visitas que se dan a estos centros, se revise con detención cada uno de los protocolos; que no sea solamente un cumplimiento con un documento que tengo que tener, sino un cumplimiento real del centro con activar los protocolos… Es un reenfocar, un volver a reforzar en el personal la importancia de asegurarse de que cada uno de estos centros está siguiendo los procedimientos que tiene que seguir, porque al fin y al cabo de lo que estamos hablando es de la vida de los niños que son los seres más indefensos que tenemos”.

De igual forma, reconoció que desde que asumió el cargo, situaciones como estas la estremecen.

"Veo situaciones como estas que llegan y me conmueven... Es bien difícil ver las situaciones que le pasan a los niños porque uno no entiende cómo puede ser que se den situaciones de maltrato, que se den situaciones de niños desnutridos, que se den situaciones donde un olvido puede ocasionar la muerte de un menor; máxime cuando, yo tengo mis hijos, verdad, y jamás me puede pasar por la mente el que una situación así se pudiera verdad (dar), que alguien se olvide de que tiene un niño en el carro”, indicó.

Aceptó que “es difícil el pensar qué otras cosas adicionales se pueden hacer para ayudar a entender cuáles son las responsabilidades protectoras para que ni un solo niño pase por ninguna situación, ni de maltrato, ni de desnutrición, y que muchos menos sea olvidado en un auto y tenga un desenlace tan terrible como el que ha pasado en este caso”, agregó.