El superintendente de la Policía, José L. Caldero López, ofreció ayer, una recompensa de $3,000 a cambio de información que conduzca al arresto del tercer sospechoso  de participar en el asesinato de la niña Arianys Rosa Luquis, de ocho años. 

 El sospechoso no ha sido identificado formalmente por los investigadores, por lo no se le han presentado cargos en ausencia por el crimen.

“Estamos buscando al tercer sospechoso, no se ha identificado todavía, sabemos quién es porque hay testigos pero estamos trabajando confidencias”, indicó Caldero López, tras reafirmar su pedido a la gente a que siga colaborando con la pesquisa. 

Durante el fin de semana el superintendente creó un grupo de trabajo para arrestar al tercer implicado el cual está compuesto por agentes de las divisiones de Inteligencia Criminal, de Drogas y Narcóticos y de Vehículos Hurtados de las áreas de Arecibo y Vega Baja. 

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El superintendente Auxiliar en Investigación Criminal (SAIC), coronel Antonio López, anticipó que durante esta semana podrían dar conocer el rostro del sospechoso en busca de confidencias que los ayuden a dar con su paradero. 

El pasado viernes se radicaron cargos  por asesinato, tentativa de asesinato, conspiración y violación a la Ley de Armas contra dos de los tres implicados, identificados como Frankie Adorno Rodríguez, de 34 años, y   José Alberto Rivera Visalden, de 49 años, quien era vecino de Ciales.

Ninguno de los dos tenía antecedentes penales.

Adorno Rodríguez, vecino del caseríoLas Violetas en Vega Alta,  es el propietario del automóvil desde el cual supuestamente se le disparó a la menor.

La jueza Yelitza Trinidad Martín, del Tribunal de Primera Instancia de Arecibo determinó causa para el arresto de ambos señalándoles una fianza de $1 millón 555 mil. 

La vista preliminar fue pautada para el 2 de junio.

Guardaditos en aislamiento

Adorno Rodríguez y Rivera Visalden fueron  ingresados en celdas de aislamiento por su seguridad en el Complejo Correccional de Bayamón, según una fuente correccional. 

Las autoridades no han revelado cuál de los tres involucrados disparó contra el padre de la menor.

Teoría de la confusión 

Investigadores de la División de Homicidios del área de Arecibo han indicado que la familia fue tiroteada por una “confusión” ya que los gatilleros buscaban a otro individuo en venganza por el crimen de Carlos Galíndez Ayala, de 51 años,  en el barrio Frontón,  en Ciales.

Este crimen fue reportado el día antes del asesinato de Arianys. 

Según fuentes allegadas a la pesquisa, el objetivo de los sicarios era un individuo apodado “El Rada”, de 37 años, quien controla los puntos de drogas de Manatí, Ciales y algunos sectores de Jayuya.

Se indicó que “El Rada” era señalado como el asesino de Galíndez Ayala, quien presuntamente era la mano derecha del líder del bando opuesto, quien se encuentra preso en el Centro de Detención Metropolitano en Guaynabo.  

“El Rada” tiene antecedentes penales por violación a las leyes de Armas y de Sustancias Controladas.