El alcalde de Lares, Fabián Arroyo Rodríguez, continúa a la espera de una respuesta por parte de FEMA (Agencia Federal de Manejo de Emergencias) a la apelación que sometieron para que esa agencia cubra parte de los fondos necesarios para la relocalización del cementerio de ese pueblo, cuyo terreno actual sigue cediendo poco a poco hacía la quebrada que le bordea.

Paralelamente, continúan trabajando en “otros procedimientos” necesarios para la relocalización del cementerio, como la medición de otro terreno con miras a adquirirlo para que se trasladen allí sobre 6,000 tumbas con osamentas, que de otra manera corren peligro de destruirse y, eventualmente, caer a la quebrada si sigue cediendo el terreno, o si ocurre algún evento de copiosas lluvias, como ya sucedió durante el impacto del huracán María en septiembre de 2017.

“Yo como alcalde continúo con el proceso de buscar otro lugar. Ya medimos. Estamos ahora terminando de medir. Ya tasamos, para expropiar. Son unas veinte y pico de cuerdas que estamos en ese proceso. Una vez se termine ese proceso, procedemos a comprar en el sector Palma Llano, cerca del sector Las Minas de Lares. Vamos a comprar ahí”, explicó Arroyo Rodríguez.

“Y a la misma vez estamos pidiéndole a FEMA que, en vez de reparar el cementerio existente, que hay unas 6,000 a 8,000, quizás hasta 10,000 tumbas con osamentas, que nos permita trasladarlo allá y así mitigar, ponerlo en su condición original, porque el Municipio y COR3 (Oficina Central de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia), y los estudios que hicieron, entendemos que el cementerio no se puede rehabilitar”, agregó.

Así las cosas, indicó, “estamos en ese pulseo con FEMA, esperando que FEMA nos autorice de qué vamos a hacer”.

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Salvarían la parte histórica

Por otro lado, el alcalde aclaró que el proyecto de relocalización no incluiría a la parte histórica del cementerio, cuya preservación requerirá de trabajos de mitigación allí, pues los estudios que se hicieron en el terreno también encontraron agua a poca distancia debajo de las tumbas.

“A los tres pies encontraron agua, cuando en realidad debería tener agua después de 15 pies para poder cumplir con los requisitos de cementerio”, explicó, refiriéndose específicamente a esa área histórica del camposanto, donde está ubicado el Mausoleo de los Mártires de la Revuelta de 1868, así como los restos de figuras importantes del pueblo.

No obstante, afirmó que “la parte histórica la vamos a salvar, porque está en el tope de la montaña”.

“Esa parte pequeña se conservaría. El resto se trasladaría al nuevo cementerio. Sí, hay una posición de FEMA de que se haga ahí donde está”, sostuvo.

Comentó que, aunque entiende que la agencia federal desea hacer una mitigación de todo el cementerio en el espacio que está actualmente, “eso es imposible, ya que la quebrada sigue halando, chupándose -como quien dice- el terreno hacia ella”.

“Eso significa que no estamos hablando solo del traslado de un cementerio. Estamos hablando que buscamos salud para la gente en los pueblos de Aguada, Aguadilla, Isabela, porque son los que toman agua del Lago Guajataca, y esa quebrada termina en el Lago Guajataca. Si ocurre otro María, o más que María, como en Yabucoa que llovió tres veces lo que María, gran parte del cementerio va a caer en la quebrada y ahí puede haber una epidemia allá en todos esos pueblos, por el agua que se va a afectar. Por eso le estamos pidiendo a FEMA que por favor nos autorice el traslado del cementerio y no nos requiera repararlo ahí”.

Detalló que al lugar llevaron incluso al ingeniero Hernán González, “que es un experto en cementerios”, y tras evaluar el área determinó que es “imposible” rehabilitarlo allí. Recordó que ya antes la Guardia Nacional ha hecho trabajos allí “en dos o tres ocasiones”, incluyendo en 2011 y 2012, y comoquiera la ladera ha seguido fallando.

“Es más, la tumba de (el notorio criminal) Toño Bicicleta desde que yo soy alcalde, ya cuatro años y pico, se ha movido en ocho pies. Y no ha llovido grave. Si llueve grave estoy seguro de que… el estudio, un estudio que se hizo por una compañía, el estudio indica que si en Lares caen unas lluvias fuertesm el cementerio nuevamente va a moverse”, aseveró Arroyo Rodríguez.

El alcalde agregó que, como parte del análisis se colocaron allí varios inclinómetros, que demostraron que “el cementerio se mueve’.

“Si miras de frente, la parte izquierda se mueve hacia la izquierda y la parte del medio se mueve en una dirección hacia la quebrada, todo el cementerio, o sea que es un peligro”, aseguró.

En base a todo eso, agregó, el Municipio y COR3 sometieron una propuesta a FEMA para que considerara el traslado, pero esa agencia “prácticamente, nos dijo que no; nos aprobó (dinero) más que para hacerlo donde estaba”.

“Es imposible. Apelamos, y estamos en una segunda apelación pidiéndole que reconsideren, porque es imposible”, insistió el alcalde.

“Es más, le estamos diciendo que el que aprobó eso, que venga a Puerto Rico, que vaya al cementerio, porque no es lo mismo en papeles que cuando usted llega allí, (el escenario es) impresionarte, y uno dice: ‘no, imposible (reconstruirlo)’”.

Arroyo Rodríguez fue incluso más categórico, agregando que “yo le he dicho a FEMA que no voy a ser responsable de rehabilitar ese cementerio ahí, cuando sé que va a fallar”.

“Que se permita trasladarlo allá (al nuevo terreno identificado) y pues el municipio pondrá los recursos, nos inventaremos lo que me tenga que inventar, pero es imposible hacerlo donde está”, insistió.

El ejecutivo municipal añadió que, además de contar con el respaldo de COR3, la gobernadora Jenniffer González Colón le envió un informe hace una semana y acordaron que el comisionado residente en Washington, Pablo José Hernández, visitaría el camposanto.

El alcalde insistió en que “no se trata de remover un cementerio, se trata de la salud de muchos compañeros que, si no removemos esas tumbas, eso va a llegar al agua, el agua va a llegar al lago, el agua va a llegar a otros pueblos”.

“Eso es una. Dos, la salud mental de muchos lareños, que todavía tienen sus restos de sus familiares y no los han podido ver o estar cerca por muchos años. Así que pidiéndole a Dios sabiduría para que nos dé la oportunidad de pronto resolver la situación del cementerio de Lares”, agregó.

Reacciona FEMA

Primera Hora solicitó a FEMA una reacción a lo expuesto por Arroyo.

La agencia, en declaraciones escritas, reconoció la importancia de las obras de recuperación que procura el municipio con el cementerio y explicó que, al momento, el proyecto “está bajo la revisión de la división de Conservación Ambiental y Preservación Histórica (EHP, por sus siglas en inglés) de FEMA, para su cumplimiento”.

“En cuanto a la intención del municipio para la reubicación del cementerio a un terreno nuevo, Lares debe someter el alcance de trabajo para un cementerio en una localidad diferente a la actual. FEMA procederá a evaluarlo, según la reglamentación correspondiente”, indicó en su respuesta.

La agencia federal desglosó los fondos obligados “para este proyecto, $2,726,554.50, correspondientes al pareo federal para llevar a cabo los estudios de arquitectura e ingeniería” y otros “$2,138,164 para trabajos de categoría de emergencia para la relocalización temporera de tumbas hasta que una ubicación permanente sea provista dentro de los términos jurisdiccionales del municipio”.

“Por otra parte, FEMA ha aprobado extensiones de tiempo para este proyecto en varias ocasiones desde el 2019. En el caso más reciente y reafirmando el compromiso para que este proyecto avance, FEMA evaluó y aprobó una extensión para este proyecto hasta el 30 de marzo de 2027”, aseguró.

Finalmente, la agencia manifestó que “mantendrá la comunicación continua con el municipio de Lares y con la Oficina Central de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia (COR3) para brindar asistencia y apoyo según sea necesario y como ha ocurrido en distintas etapas del proceso de trabajo para la formulación de este proyecto”.