Parchos de humedad transportado por los medios alisios se han movido este martes sobre la Isla, provocando leves acumulaciones de lluvia en el este interior afectado por la sequía, informó el meteorólogo Gabriel Lojero, del Servicio Nacional de Meteorología (SNM) en San Juan.

El experto precisó que sectores de Las Piedras, Juncos y San Lorenzo, donde nace el río Grande de Loíza, han recibido entre media a tres cuarto de pulgada de lluvia.

“Es buena noticia comparado con los otros días que ha estado completamente secos”, opinó.

La necesidad de que llueva en el este interior se debe a que los niveles del embalse Carraízo continúan disminuyendo a causa de la sequía que se registra en este inicio de la temporada lluviosa. En esta zona hay una deficiencia de lluvia de hasta cuatro pulgadas en los pasados 30 días.

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Según el reporte diario de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados, Carraízo amaneció hoy con una baja de .07 centímetros. Ya se encuentra en nivel de “observación”.

Gráfica de los niveles de los embalses para el 12 de mayo.
Gráfica de los niveles de los embalses para el 12 de mayo. (Captura)

Lojero planteó que “se necesita mucha más lluvia para que haga algo significativo” en los niveles del embalse, el cual suple agua potable a gran parte de la zona metropolitana de San Juan.

No obstante, esta semana “no hay mucha dinámica en la alta atmósfera para que esta lluvia sea ‘heavy duty’”, como se necesita, planteó el meteorólogo.

Otro embalse que pudiese recibir lluvia esta tarde es el lago Guajataca. Esto se debe a que la humedad disponible, al dirección del viento y los efectos locales concentrarían los aguaceros en el noroeste de la Isla.

Sin embargo, Lojero volvió a establecer que no serán las cantidades que se necesitan se registren en la zona de Lares y San Sebastián para que se observe un cambio significativo del embalse.

“Se necesitan tres a cuatro pulgadas de lluvia que caiga alrededor del embalse, pero eso no se espera”, indicó.

El lago Guajataca ha arrancado esta sequía que se registra desde hace dos semanas en peor estado. Se encuentra en nivel de “ajustes operacionales”. Tiene un nivel de 189.21 metros.

Se espera que en los próximos días estos parchos de humedad, arrastrados por los vientos alisios, continúen llegando a la zona. No hay ningún sistema que provoque que esta lluvia sea significativa, recalcó el meteorólogo.

“A lo mejor mejora un poco la semana que viene, a medidas se desarrolla una vaguada en la media atmósfera”, comentó.

Entretanto, no se espera la llegada de algún pulso de particulado de polvo del desierto del Sahara.

Este pronóstico, unido a que los cielos estarán nublados, provocaría que la temperatura no alcance los niveles registrados la semana pasada que en varias ocasiones alcanzó los 93 grados Fahrenheit.

Lojero comentó que podría mantenerse en los 90 grados Fahrenheit.

Por otro lado, las condiciones marítimas están tranquilas para la mayoría de las playas, exceptuando en aguas a más de 10 millas náuticas del océano Atlántico. Allí el oleaje está hasta seis pies, por lo que se les recomienda a los marineros que ejerzan precaución.

Para el resto de las aguas, el oleaje está hasta cinco pies y los vientos hasta 20 nudos.

El riesgo de corrientes submarinas está moderado para la mayoría de la Isla, excepto el oeste. Bajo estas condiciones se les pide a los bañistas que ejerzan precaución. No obstante, el uso de las playas está vedado por la cuarentena impuesta para evitar el contagio del coronavirus.