No existe una manera absoluta de prevenir el cáncer del seno. Aun cuando se siguen las recomendaciones de numerosas campañas de autodetección, detección temprana, de modificar el estilo de vida a uno más saludable y cambiar los valores de riesgo que están bajo nuestro control, todavía podemos dar con un hallazgo no deseado en los estudios de cernimiento. Por tal razón es de suma importancia no dejar de realizarse las pruebas de detección programadas por el médico ya que, en muchas mujeres, el cáncer de seno no presenta síntomas.

Muchas décadas de investigación demuestran que las pruebas de detección habituales, como son la mamografía y la sonomamografía, representan la manera más confiable para encontrar el cáncer de seno en una etapa temprana, ya que su propósito es detectar la enfermedad en personas que no tienen ningún síntoma, lo que llamamos detección temprana.

Así mismo ha quedado demostrado que las mujeres a las que se les diagnostica cáncer de seno en una etapa inicial -cuando es pequeño y no se ha extendido- son más fáciles de tratar con buenos resultados y tienen menos probabilidades de necesitar tratamiento agresivo, como cirugía para extirpar el seno (mastectomía), quimioterapia, y tienen más probabilidades de curarse.

Es de suma importancia entender que no todos los hallazgos sospechosos que se presentan en los estudios de cernimiento son algún tipo de cáncer. Es muy común que sea necesario que la paciente regrese al centro radiológico a realizarse algunas vistas adicionales sugeridas por el radiólogo, que es el doctor que interpreta las imágenes, o, inclusive, que le recomiende algún estudio más avanzado para descartar las distintas posibilidades.

Tomosíntesis digital

Uno de los estudios más avanzados disponible para el beneficio de los pacientes es la tomosíntesis digital o también conocida como mamografía tridimensional (3D). Esta supera algunas de las limitaciones de la mamografía convencional como es la evaluación del tejido en un seno denso, ya que el tejido anormal puede quedar escondido bajo el tejido sano. También ha demostrado mejorar la precisión y reducir las tasas de falsos positivos en mujeres con senos de todo tipo de densidad. Otra ventaja derivada de este novedoso estudio es el número menor de repeticiones de mamografías, así como la reducción de biopsias, lo que lleva a un mejor diagnóstico.

El procedimiento es similar al de una mamografía convencional, pero aplicando menos presión al seno, lo que hace que sea más tolerable. El tubo de rayos X se mueve alrededor del seno comprimido, creando múltiples imágenes en diferentes ángulos. Estas imágenes digitales luego se reconstruyen por computadora para crear un conjunto de imágenes tridimensionales.

De existir una lesión sospechosa, nos permitiría saber con precisión su forma, contornos, tamaño, ubicación y extensión exacta en que se encuentra en el seno. En esta etapa clínica, cuando otros estudios muestran algún tipo de lesión sospechosa, es muy probable que tu médico te recomiende una biopsia.

Biopsia

El tener que realizarse una biopsia no necesariamente significa que tienes cáncer, pero mediante este procedimiento mínimamente invasivo, un radiólogo o un cirujano obtiene una muestra de tejido del área que causa sospecha para que se pueda examinar en un laboratorio, y saber si existen células cancerosas. Existen diferentes tipos de biopsias: FNA o aspiración con aguja fina, estereotáctica y la biopsia quirúrgica. El tipo de biopsia a realizarse depende del tamaño de la lesión, la cantidad de tejido que se quiera extraer y la localización de esta en el seno.

Resonancia magnética

También contamos con la resonancia magnética o MRI por sus siglas en inglés. Es otra modalidad que ha seguido avanzando para beneficio de los pacientes. A veces, el MRI de los senos se utiliza en las mujeres que ya han sido diagnosticadas con cáncer, ayuda a medir el tamaño, identificar otros tumores en el seno y a la misma vez evaluar/detectar tumores en el seno opuesto.

Una de las ventajas es que esta modalidad no emplea radiación, sino que trabaja con un campo magnético tomando imágenes desde muchos ángulos del tejido mamario. Es importante saber que a pesar de que el estudio de Breast MRI se recomienda para pacientes con un alto riesgo mayor de 25 %, no sustituye a la mamografía convencional o 3D, si no que van de la mano para ofrecer un mejor diagnóstico y tratamiento.

D' Mujer Health and Prevention Center

En D' Mujer Health and Prevention Center tenemos varias opciones a ofrecer en la rama de la radiología para ayudar con la detección temprana, seguimiento y tratamiento de esta condición que afecta a tantas mujeres.

Estudios indican que las tasas de supervivencia del cáncer de seno han aumentado y el número de muertes asociadas con esta enfermedad han ido disminuyendo en los últimos años gracias a las medidas de detección temprana.

La clave triunfal se encuentra en cambiar la perspectiva de la enfermedad, en guiar y darle un enfoque más esperanzador a los pacientes, orientando y ofreciendo todos los avances tecnológicos que puede brindar la radiología.

Para orientación e información sobre nuestros servicios, llama al 787-999-8946.

El autor es neurorradiólogo, director médico de D' Mujer Health and Prevention Center del Hospital Metropolitano.