“Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en el mundo occidental, por eso es tan importante la prevención temprana de los factores de riesgo para prevenir las enfermedades cardíacas, ya sean infartos cardíacos, infartos cerebrales y problemas circulatorios periféricos”, dijo el doctor Ricardo Colacioppo, cardiólogo clínico y tesorero de la Sociedad Puertorriqueña de Cardiología.

Durante el mes de febrero, además de ser el Mes del Corazón, se celebra el Mes de la Concienciación sobre las Enfermedades Cardiovasculares en la Mujer. Según la Sociedad Americana del Corazón, las mujeres mueren más por condiciones cardíacas que por cáncer. Solo el 44% de las mujeres reconoce que las enfermedades del corazón son un gran riesgo para la salud.

Colacioppo, quien lleva once años ejerciendo la cardiología clínica, explicó que la incidencia de las enfermedades va aumentando en la mujer sobre todo cuando está en la etapa de la menopausia. De la misma forma, relató cómo las féminas pueden presentar con frecuencia síntomas atípicos y no los comunes para las condiciones cardiovasculares como sería el dolor de pecho.

“A veces pueden sentir síntomas de disnea o falta de aire, pueden ser asintomáticas también. Sin embargo, las mujeres, cuando se afectan por un infarto cerebral o uno cardíaco, muchas veces tienen una presentación mucho más severa o un daño mucho mayor, ya que la condición se presenta de una forma más agresiva en las mujeres”, advirtió.

Los factores de riesgo más comunes son: hipertensión, diabetes y colesterol alto. Esto provoca infartos cardíacos, depósitos de colesterol en las arterias, infartos cerebrales o apoplejías, seguido por complicaciones en los vasos periféricos, los problemas de circulación arterial o alteraciones en las carótidas. El cardiólogo mencionó que en Puerto Rico existe una alta incidencia de problemas de diabetes e hipertensión por estilos de vida sedentarios, y dieta alta en grasa y en sodio, entre otros, por lo que la mujer, teniendo una expectativa de vida más larga, ahora se encuentra más a riesgo que en épocas anteriores.

Una de las condiciones que podrían presentar tanto mujeres como hombres es la fibrilación auricular. Esta es la arritmia más común que existe y se caracteriza por ser un ritmo rápido e irregular en el corazón. Este tipo de fibrilación puede aumentar los riesgos para que las personas sufran de infartos cerebrales, desarrollo de falla cardíaca, hospitalizaciones y cambios en la calidad de vida.

Los síntomas más comunes son:

  • Falta de aire
  • Palpitaciones o latidos acelerados
  • Mareos
  • Cansancio
  • Dolor de pecho
  • Menos frecuentes, asintomáticos

Las personas que son asintomáticas se pueden detectar a través de exámenes físicos, para detectar pulsos irregulares, que usualmente se detectan a través de un electrocardiograma o con un monitor Holter. Igualmente, los relojes inteligentes tienen la capacidad para detectar el pulso y determinar si existe una arritmia. Las probabilidades de que una mujer desarrolle este tipo de condición ahora son más latentes. Es importante destacar que las mujeres pueden presentar síntomas atípicos que podrían causar confusión. Muchas veces, describen estas palpitaciones como un aleteo o una sensación rara en el pecho. Como siempre, recomiendo a mis pacientes que la única forma de descartar esto es realizándole un electrocardiograma para determinar lo que en realidad está sufriendo la persona”, expresó Colacioppo.

Existen dos tipos de intervenciones de las cuales una puede ser una ablación cardíaca, en donde, se aíslan las venas pulmonares, utilizando catéteres y técnicas electrofisiológicas para terminar la arritmia haciendo que su recurrencia sea menos frecuente.

El médico agregó que en pacientes con alto riesgo de sangrado y que no se le pueden administrar anticoagulantes, se les coloca un dispositivo para tapar la orejuela del atrio izquierdo (dilatación alrededor de las cuatro venas pulmonares), previniendo la formación de coágulos.

“La Sociedad Puertorriqueña de Cardiología tiene como meta principal llevar campañas educativas tanto para pacientes como para proveedores de servicios de salud. Con frecuencia, ofrecemos charlas sobre las condiciones cardiovasculares más comunes. Sobre todo en tiempos de pandemia, es importante la atención de las enfermedades crónicas. Frecuentemente realizamos congresos para mantener a los colegas con educación continua”, añadió.

A modo de exhortación, el especialista insistió en que las personas retomen sus visitas médicas. Detalló que los profesionales de la salud están tomando todas las medidas para garantizar la seguridad de los pacientes para lograr la prevención de enfermedades, en especial las cardiovasculares. Además, continuar fomentando estilos de vida saludables, alimentación balanceada y un buen programa de ejercicios. Todo esto va de la mano con el cumplimiento de las terapias recomendadas por sus especialistas.