Sebastián Molano Suárez, en ocasiones, siente que su niño lo hace enojar. El menor tiene tres años y su padre es el creador de Defying Gender Roles, una plataforma que busca exponer formas alternativas de entender la masculinidad en los hombres. Aunque molesto, Molano es capaz de detener un impulso para pegarle a la mesa en un acto de autoridad, pues sabe que “la intimidación funciona”, pero deja cicatrices que no fomentan una niñez ni sociedad sana. En su lugar, opta por una paternidad basada en el diálogo y aprendizaje continuo.

Al igual que Molano Suárez, Javier Morales y José Montañez prefieren ejercer paternidades distintas a la tradicional, que se basa en la figura de un hombre como proveedor y que delega la mayor parte de las tareas en la madre. Los tres aseguran que es difícil definir lo que es un “buen padre” o un “mal padre”, sino que las experiencias moldean el quehacer de la crianza.

“Claro está, promovemos que sea una paternidad no violenta; una paternidad presente, activa, corresponsable, equitativa, compasiva, que provea amor, y cuidado, más allá de protección. Pero, más allá, no te diría que sea de [ser] bueno o malo [como padre], sino que facilitamos esas referencias de cómo vivir una paternidad plena… que sea de bienestar para él y para sus hijos y la familia”, argumentó Montañez en una entrevista telefónica en la que también participó Morales.

Morales y Montañez pertenecen al programa SePare, de la organización sin fines de lucro Caderamen. Allí, gestionan un grupo de apoyo para hombres y paternidades donde les ayudan con sus procesos.

A pesar de que los tres coinciden en que no existe un manual con pasos a seguir para ejercer una paternidad sana, ofrecieron algunas guías para facilitar el proceso.

Ten la experiencia de cuidado

Según Molano, quien también es gerente de feminismo interseccional para la organización internacional Oxfam, tomarse el tiempo de cuidar a un niño es una manera de retomar la sensibilidad que se pierde con la violencia.

“Los hombres se pasan la vida sin darse cuenta de que la experiencia de cuidado es lo que más los humaniza”, explicó el experto, quien lleva diez años trabajando temas de género. Aseguró que, cuando se practica el cuidado, la vida cambia.

Morales, por su parte, detalló que, en los talleres, fomentan lo que llaman un “papá ‘activa’o’”. Se trata de “cómo tú te activas para estar con tus hijos; cómo tú te activas para asumir la responsabilidad de los cuidados, la responsabilidad de vivir bajo un mismo techo con otras personas… es reflexionar sobre eso”, afirmó el padre de tres niños y quien dirige SePare desde sus inicios, en 2015.

Fomenta relaciones equitativas

De acuerdo con Molano Suárez, la opresión se aprende en el hogar, de manera que resulta imprescindible que se establezcan relaciones equitativas con los hijos. “Tú aprendes tanto de ellos como ellos de ti”, detalló.

Por otra parte, Morales insistió en evitar creerse con total autoridad sobre los hijos.

“Les tratamos de iguales y les pedimos las disculpas que sean necesarias, y nos comprometemos también con ellos, porque, sí, tenemos unas responsabilidades con ellos y hay una relación de cuidado, pero eso no nos hace más”, sentenció.

Trabaja para eliminar la violencia

Molano Suárez aprovechó la conversación para destacar que las formas tóxicas en que se ejerce la paternidad actualmente les cuestan la vida a muchas personas.

“Si los hombres nos tomáramos la paternidad tan en serio como nos tomamos el trabajo, las mujeres no tendrían que pagar el costo que tienen que pagar hoy y los hijos tampoco”, manifestó. De igual forma, aseguró que la única forma de proteger es cuidando y no violentando.

Montañez, por su parte, subrayó que la violencia nunca es un hecho aislado. Sin embargo, mantiene la esperanza de que la experiencia de una paternidad plena pueda ser una vía para erradicarla.

“La violencia que ejerce el hombre contra la mujer no se da de manera aislada, sino que está vinculada con la violencia que ejerce hacia otros hombres… y la violencia que comete hacia sí mismo… La paternidad, también puede ser esa semillita que, de alguna manera u otra, ayude a minimizar esos efectos o esas problemáticas que hay”, aseveró el también trabajador social.

Ten la voluntad de cambiar y sanar

De acuerdo con Molano Suárez, “la paternidad es una expresión de la masculinidad”. Para él, resulta fundamental que los hombres reflexionen sobre aquellas imposiciones sociales con las que cargan tales como: falta de autocuidado, machismo y represión de las emociones, para ejercer paternidades diferentes.

Montañez, por otro lado, señaló que el trabajo de cambio requiere, también, reflexionar sobre vivencias y evitar juicios contra los progenitores de quienes ahora son padres.

Actúa

Morales invitó a los hombres a exigir legislación para pasar más tiempo con los hijos y a aprovechar las herramientas existentes. “[Los servicios] son limitados, pero, a veces, están vacíos… Nosotros tenemos los encuentros y, a veces, nos llegan cinco papás”, detalló para luego exhortar a los hombres a que se eduquen desde los espacios que mayor comodidad les transmitan, tales como: SePare, Espacio Tipos y Entre Hombres PR.