La experiencia de compartir con pacientes y sobrevivientes de cáncer de seno en Susan G. Komen Puerto Rico, nos ha dado la oportunidad de conocer un poco el sentir de muchas de las mujeres diagnosticadas con esta enfermedad y cómo sus vidas se transforma ron de la noche a la mañana.

Hemos aprendido que un diagnóstico de cáncer de seno les cambia la vida por otra nueva vida. No es fácil asimilar que estás enferma y menos de cáncer… hay mucho miedo, coraje, dolor, pero, sobre todo, de no entender el “¿y por qué a mí?”. Al pasar el torbellino de ir a médicos, realizarse pruebas y de tomar decisiones rápidas, casi sin tiempo —porque el tiempo cuenta— va renaciendo una mujer más fuerte y valiente, y su bravura sale a flote. Hay temor, pero, al mismo tiempo, valentía; suena complicado, pero es una mezcla entre el dolor de ser diagnosticada con todas sus consecuencias y la fuerza de no dejarse vencer. Entonces, el cáncer de seno es su nueva lucha, una batalla que llega sin avisar y sin tregua; una que debe ganar por ellas y por lo que tanto aman.

En Susan G. Komen Puerto Rico, ellas son la razón de nuestra lucha y trabajo: por todas aquellas que hoy están recibiendo un diagnóstico, por aquellas que están recibiendo un tratamiento y por todas las que celebran sus años de sobrevivencia; por ellas seguimos nuestra promesa de salvar vidas.

Octubre es el Mes de la Concienciación sobre el Cáncer de Seno y lo recordamos con el color rosado. Y, aunque al principio, para una mujer diagnosticada con cáncer de seno, su dolor no tiene color, luego, al pasar el tiempo el color rosa se convierte en su bandera: simboliza fortaleza, valentía, fe, esperanza, resiliencia y, para otras, es símbolo de una gran batalla ganada. Al vestirnos de rosa, lo hacemos en honor a ellas, las pacientes y sobrevivientes de cáncer de seno.

En Komen, la promesa es salvar vidas, a través de la detección temprana. Por esto, recordamos a toda mujer que eres un factor de riesgo desde que naces: ser mujer y envejecer son los principales factores de riesgo del cáncer de seno, así que es importante que saques tiempo para ti, que te realices todas tus pruebas de cernimiento correspondientes a tu edad.

Y, por último, no olvides adquirir tu camisa rosa de Pink Day, que, este año, tiene como mensaje: “Piensa Positivo, Agradece todos los Días”. Los pensamientos y las actitudes positivas nos ayudan a atraer todo lo bueno y contribuyen a nuestra paz. Y “agradecer todos los días”, es un mensaje poderoso, que nos recuerda que la vida es distinta, si agradecemos lo que tenemos… y esto atrae la felicidad.

Lynnette M. Rodríguez

Directora ejecutiva

Susan G. Komen Puerto Rico