La Administradora Regional Interina de la Agencia Federal de Protección Ambiental (EPA), Catherine McCabe, anunció que la agencia federal acordó con el Municipio de Santa Isabel, completar el cierre final de su vertedero municipal para julio de 2019.

El acuerdo incluye trabajar con controles de protección ambiental después del cierre, implementar un programa de reciclaje y establecer un programa piloto de compostaje en el vertedero que ya no recibe desperdicios sólidos.

“La EPA sigue evaluando aquellos vertederos en Puerto Rico que han alcanzado o superado su capacidad y presenten condiciones que amenacen la salud pública y el medio ambiente”, expresó McCabe, al recalcar que “es imperativo que los propietarios y operadores de vertederos en Puerto Rico cumplan con sus responsabilidades de operar y cerrarlos adecuadamente para proteger la salud de las comunidades cercanas”.

 El municipio deberá mantener una cubierta provisional sobre el vertedero para ayudar a controlar los olores y el material que pueda volar o esparcirse, asegurarse que el vertedero está debidamente resguardado con una verja y seguridad adecuada, instalar y operar un sistema de monitoreo de aguas subterráneas a ser aprobado por la EPA, e implementar un programa de reciclaje para ayudar a minimizar el volumen de materiales de desecho en los rellenos sanitarios de Puerto Rico.

El acuerdo, que está sujeto a un período de comentario público de 30 días, está condicionado a la aprobación por el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos antes de llegar a ser definitivo, subrayó la funcionaria.