A tres días del altercado que le dio la vuelta al mundo, el ahora exrefuerzo de los Mets de Guaynabo DeMarcus Cousins rompió el silencio tras ser suspendido por el resto de la temporada del Baloncesto Superior Nacional (BSN) por su conducta en el juego del lunes contra los Vaqueros de Bayamón en el Coliseo Rubén Rodríguez.

“Quiero pedirles disculpas a los fanáticos de Puerto Rico por mis acciones. Siento un gran amor y respeto por la isla”, escribió Cousins en una historia en su cuenta de Instagram.

Cousins se encaró el lunes con varios fanáticos de los Vaqueros después de haberle reclamado a los árbitros una alegada falta de Danilo Gallinari. Uno de los aficionados en primera fila hizo un gesto burlón, simulando que estaba llorando.

Cousins procedió a hacer un gesto obsceno tocándose sus genitales y la tensión escaló. Las personas en primera fila se levantaron de sus asientos y Theophilus Pinson Jr. tuvo que intervenir para evitar que llegara a mayores.

El olímpico fue expulsado con una falta descalificatoria. Cousins, visiblemente molesto, salió escoltado, agitando los brazos y diciéndoles un sinnúmero de cosas a los fanáticos, lo que provocó que le lanzaran varias cervezas.

El centro, de 34 años y 6’10” de estatura, perdió el control antes de entrar al túnel que conduce hacia los camerinos del Rubén Rodríguez y trató de zafarse del personal de seguridad para pelear con los espectadores.

Como consecuencia, además de suspenderlo por el resto del torneo, el BSN lo sancionó el martes con una multa ascendente a $4,250 por una falta descalificatoria, una falta técnica y los actos en los que “incitó a la violencia o provocación”. Además, le ordenó que justificara por qué no se le debía imponer una multa adicional de $5,750. De lo contrario, se expone a multas que superan los $10,000.

Los Mets, por su parte, comunicaron el martes en la noche la terminación del contrato de Cousins y condenaron sus actos en Bayamón.

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