Un accidente de auto descarriló las ambiciones de William “Piru” Guzmán en el boxeo rentado cuando a penas tenía 20 años. Una década después, decidió darse otra oportunidad.

“Tengo 30 años, iba a debutar cuando tenía 20, pero no se dio. Tuve un accidente y seguí mis estudios en contabilidad. Estuve dos meses con yeso, tenía mis estudios. Seguí estudiando y me olvidé del boxeo”, recordó.

Una vez completó un bachillerato universitario, Guzmán se lanzó al mundo laboral. Ocupó una posición en una cooperativa y también trabajó en otros lugares.

Pensé que nunca se iba a dar hasta que comencé mi negocio. Entreno a personas, ayudo a aquellos que necesitan bajar de peso y a jóvenes que son boxeadores aficionados. Me motivé, comencé a entrenar para mi, vi que podía volver”, compartió.

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El pasado noviembre hizo su debut en el Coliseo Pedrín Zorrilla en San Juan con un triunfo por decisión unánime sobre Juan Carlos Montañéz. Esta noche, subirá al ring nuevamente durante una cartelera que tendrá como escenario la cancha Gelito Ortega en Naranjito.

Guzmán, de Barranquitas, enfrentará al debutante Alex Pallete a cuatro episodios.

Nunca es tarde si la dicha es buena. Uno lo que tiene que hacer es dedicarse. Me dediqué varios meses, hablé con Miguel Cotto Promotions y surgió la oportunidad”, indicó.

Guzmán no tiene claro hasta dónde podrá llegar como boxeador, pero quiere averiguar.

“Voy poco a poco. No quiero apresurar las cosas ni adelantar pasos. Tengo 30 años, esperaré dos o tres años para ver a dónde llego y de ahí partimos. Me siento maduro, más inteligente y, como nunca recibí golpes, estoy fresco”, concluyó.