El boxeo será, en 15 días, el primer deporte que entre al ruedo en los Juegos Panamericanos Santiago 2023 y, ante la cercanía, el equipo de Puerto Rico está en Colombia tomando fogueos de calidad ante otras delegaciones que también pelearán en los Juegos.

La delegación que componen Caleb Tirado, Ashleyann Lozada, Stephanie Piñeiro, Ángel Llanos y Gracemarie Quiles y Eliezer Brito entrena en suelo colombiano desde hace dos semanas con la mira puesta en subir al podio de Santiago en sus distintas divisiones y lograr las plazas olímpicas que otorgan los Juegos.

“Hemos trabajado arduamente”, dijo Tirado. “Hemos hecho sparring con los peleadores de Colombia, Brasil, Canadá y Argentina. México va a llegar. Y nos vamos a seguir preparando para lograr la medalla de oro y clasificar para las Olimpiadas”, agregó.

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La púgil Gracemarie Quiles y su entrenador Carlos Espada se preparan para un salto de guanteo en la base de Colombia.
La púgil Gracemarie Quiles y su entrenador Carlos Espada se preparan para un salto de guanteo en la base de Colombia. (Cortesía/Carlos Espada)

El torneo de Santiago 2023 se anticipa como uno de alto nivel porque tiene el incentivo de que cada división otorga la clasificación olímpica para los Juegos París 2024 a los ganadores de oro y playa, con la excepción de las divisiones femeninas de 57 y 60 kilogramos que darán plazas a las primeras cuatro posiciones.

Es por tanto que, a excepción de las potencias de Cuba y Estados Unidos, muchos países se juntaron en Bogotá para entrenar en la altura de esa ciudad, lo que se espera les beneficie cuando bajen al nivel del mar en Santiago y foguear ante los mismos púgiles a los que enfrentarán en el torneo de los Juegos.

A juzgar por el nivel en Bogotá, los Panamericanos tendrán un torneo de boxeo sin rivales pequeños.

“Por lo que uno ve, no nos podemos dormir”, resumió el entrenador de Puerto Rico, Carlos Espada.

Lozada y Piñeiro vienen de dominar sus respectivas divisiones de 57 y 66 kilogramos en los Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023. Tirado también se colgó una medalla en los Juegos. En comparación con la región, que tiene a potencias como Cuba y México, el continente aplica más nivel competitivo aún con la participación de Estados Unidos, Canadá, Brasil, Argentina, entre otros.

Espada dijo que la idea del campamento en cuanto a fogueo es que cada púgil acumule entre 24 y 27 asaltos ante rivales panamericanos, mientras se acercan al peso en que deben subir al ring en Santiago 2023.

“Estamos haciendo sparring tres veces a la semana. Los boxeadores tienen que hacer un peso para hacer los sparrings y en la última semana (del acuartelamiento) tiene que hacer el peso exacto para hacer el sparring. Cada boxeador tendrá aproximadamente ocho peleas de guanteos, cada una de tres asaltos de tres minutos, como en los Juegos”, explicó.

El protector facial que llevan los púgiles en los guanteos es la única diferencia en comparación con la competencia real.

El acuartelamiento durará semana y media más. La delegación boricua regresará a Puerto Rico unos días para despedirse de sus familiares y preparar la logística del viaje y equipaje hacia Santiago 2023 en la avanzada de atletas el 16 de octubre.

“No vamos a descuidar los entrenamientos en esos días”, avisó Espada.

El torneo de boxeo de Santiago 2023 inicia el 19 de octubre, un día antes de la inauguración de los Juegos.

Puerto Rico logró un oro en la edición Lima 2019 con una sobresaliente actuación del ahora profesional Oscar Collazo.

El equipo boricua aspirará nuevamente al podio panamericano, a juzgar por el acuartelamiento en Bogotá.

“Hemos tenido guanteos de alta calidad y todo el mundo ha lucido muy bien. Es una alta competencia que tenemos aquí y tenemos que estar al 100 por ciento”, dijo la púgil Piñeiro.