WASHINGTON. El presidente de la Universidad de Misuri, Tim Wolfe, anunció hoy su dimisión debido a las crecientes críticas por su gestión ante las quejas de racismo en el campus universitario, y el reciente plantón de los miembros del equipo de fútbol universitario hasta que no dejase el cargo.

"Mi motivación a la hora de tomar de esta decisión viene del amor a la Columbia (ciudad en la que está la universidad) donde crecí y al estado de Misuri. Es la decisión correcta", aseguró Wolfe en una breve comparecencia, tras comunicar su dimisión al consejo directivo de la universidad, que cuenta con 27,000 estudiantes.

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"La frustración y enfado que veo -añadió- es real y no lo dudo por un segundo", agregó.

Las tensiones y protestas habían comenzado en septiembre pasado, cuando diversos grupos de estudiantes afroamericanos denunciaron insultos racistas y acoso por parte de otros estudiantes, y aseguraron que sus quejas habían sido desoídas por la dirección del centro académico.

Entre los objetos utilizados, se había encontrado una esvástica escondida en uno de los dormitorios del campus.

Este fin de semana, más de 30 integrantes del equipo de fútbol universitario afirmaron que no volverían a jugar hasta que Wolfe dimitiese, y un estudiante, Jonathan Butller, se declaró hace una semana en huelga de hambre con el mismo objetivo.

En su anuncio, Wolfe asumió "toda la responsabilidad por la inacción ocurrida", e instó a la comunidad universitaria "a escucharse y dejar de intimidarse mutuamente".

Muchas de las protestas han sido promovidas por una organización denominada Concerned Student 1950, en referencia al año en el que el primer estudiante afroamericano fue aceptado en la universidad.

Según esa organización, parte de los problemas vienen del "silencio" adoptado por la dirección de la universidad tras la muerte a tiros en 2014 por parte de un policía blanco del joven Michael Brown, en la localidad Ferguson, también en Misuri.

El grupo envió una carta en la que subrayó que "la Universidad de Misuri encaró la muerte de Brown en silencio".

"En los meses sucesivos nuestros estudiantes fueron dejados abandonados, forzados a encarar un incremento en la tensión y desigualdad sin el apoyo del sistema, (...) y la calidad de la vida de nuestros estudiantes solo ha empeorado", aseguró Concerned Student 1950.

La muerte de Brown en Ferguson, un suburbio de San Luis a 200 kilómetros al este de Columbia, provocó una ola de disturbios en todo Estados Unidos por los abusos policiales sobre la comunidad afroamericana.