El gobernador Ricardo Rosselló no descartó hoy lunes que la muerte de un hombre registrada en Canóvanas sea a causa de leptospirosis.

Al tiempo en que dijo “fuimos muy diligentes”, el gobernador indicó que aún verifican la información y esperan por laboratorios médicos para confirmar si en efecto la enfermedad, causada por el orín de ratas, fue la que provocó la muerte de Jorge Antonio Sanyet Morales.

“Fuimos muy diligentes. Estamos aquí recibiendo toda la data.  La parte más importante es implementar una estrategia de prevención. Muchas de estas enfermedades pueden ser prevenidas si se provee la información”, dijo el primer ejecutivo.

La alcaldesa de Canóvanas, Lornna Soto, ha dicho que nueve personas supuestamente están infectadas con leptospirosis y cinco son residentes de su pueblo.  

Así las cosas, Rosselló dijo que hay que esperar por los resultados de los laboratorios para confirmar los casos.

“Hay unos síntomas y los síntomas de leptospirosis son similares a los del dengue. Tienen algunos síntomas que son similares. Hay unos laboratorios que se tienen que hacer para confirmar si en efecto es (la enfermedad)”, apuntó.

“En circunstancias como estas es muy probable que este tipo de enfermedad pueda ocurrir. Nuestro objetivo es identificarlo rápidamente, comunicar lo que pueda provocar esa enfermedad para el resto de la población y trabajar con los pacientes que han tenido ello. No se ha podido confirmar porque los laboratorios toman unos cuantos días en poder hacerlo, pero debemos asumir que es una posibilidad que se tenga. La doctora (Carmen Deseda, epidemióloga del Estado,) está constatando de manera apropiada. Es científica”, reiteró.

Acto seguido, recalcó que “hay un esfuerzo de prevención” para informar sobre enfermedades infecciosas que se pueden transmitir al bañarse en ríos o tomar agua de distintos cuerpos de agua. “Tan pronto tengamos la confirmación de ello, se le estará dando”, afirmó.

Preguntado si tenía la confianza de que no morirán más personas por causas indirectas del huracán María, Rosselló contestó que se mantiene “vigilante”.

“A mí me gustaría decir que tenemos ya todo el control y que podemos evitar que estas cosas ocurran. Lo cierto es que hemos pasado una tormenta de devastación mayor que ha provocado el colapso de energía eléctrica, de acceso a agua, de algunas áreas y ciertamente expone a algunos ciudadanos a poder tener algunas de estas enfermedades”, aseveró.  

“No es la confianza de que ya lo vamos a parar. Sí es el compromiso de que vamos a estar trabajando para identificar dónde escuchemos que ocurren estas cosas”, agregó.

A modo de ejemplo, Roselló dijo que supieron que en el sureste de la Isla supuestamente había un brote de cólera y al investigarlo, se constató que no era cierto.

Se le cuestionó dónde estaba el secretario de Salud, Rafael Rodríguez Mercado, que casi nunca se le ve por el Centro de Comando del Gobierno en el Centro de Convenciones, el gobernador dijo que el funcionario está en la calle.

“La verdad es que lo hemos enviado a un sin número de misiones”, dijo el gobernador.  

“Puedo decir -porque he estado hablando con él continuamente- (que) ha estado yendo a los distintos hospitales para garantizar que las condiciones estén óptimas, que los pacientes estén bien”, agregó.

De inmediato dijo que el sistema de salud del país está “frágil”.

“Esto no es que está arreglado. Arreglar nuestro sistema de salud va a tomar muchísimo tiempo. La preocupación que le esbocé a ustedes y al secretario de Salud es que tenemos que estar vigilantes”, sostuvo Rosselló.