Apuesta por el bienestar integral para vivir mejor con enfermedades reumatológicas
Ejercicio adaptado, alimentación antiinflamatoria y salud mental: el nuevo enfoque de vida para los pacientes

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El diagnóstico temprano y un estilo de vida que incluya buena nutrición, actividad física y salud emocional son vitales para manejar las enfermedades reumatológicas entre las que se encuentran la artritis reumatoidea, osteoartritis y artritis psoriásica.
“Si una artritis reumatoide se diagnostica en etapa temprana, hay mucha más oportunidad de evitar daños irreversibles a las articulaciones y preservar la funcionalidad”, señaló el doctor Ricardo Gago.
Explicó que aunque hoy existen medicamentos cada vez más específicos para bloquear mecanismos inflamatorios y evitar el deterioro de las enfermedades autoinmunes, el autocuidado es clave para que el tratamiento sea aún más efectivo. Por lo tanto, orienta a los pacientes a asumir un rol activo en el manejo de su enfermedad.
El concepto de “integral” puede sonar abstracto, admitió doctor Gago, pero tiene fundamentos claros: dieta, ejercicio y bienestar emocional.
“La grasa corporal estimula canales inflamatorios que empeoran las afecciones reumatológicas. El sobrepeso es un estímulo que hay que contrarrestar para evitar dolores y daños de los procesos inflamatorios. Por eso, una buena alimentación y mantener un peso saludable son esenciales”, destacó.
Entre las dietas más recomendadas, el reumatólogo enumeró la dieta mediterránea, caracterizada por vegetales frescos, granos enteros, pescado, aceite de oliva y frutos secos. Estudios la vinculan con un menor grado de inflamación y una mejor salud cardiovascular, aspecto crucial en los pacientes con enfermedades autoinmunes.
Entre las recomendaciones más contundentes del especialista se encuentra el ejercicio.
“El ejercicio fortalece los músculos, y cuando una articulación ya está deteriorada, esos músculos compensan. Si no, el paciente puede perder estabilidad y hasta caerse”, explicó.
Así, fortalecer los músculos alrededor de las rodillas —una articulación frecuentemente afectada— puede significar la diferencia entre caminar con dificultad o mantener la independencia.
Pero los beneficios van más allá de lo físico, el ejercicio estimula las proteínas antiinflamatorias naturales del cuerpo. También tiene un impacto directo en la salud mental, un aspecto inseparable en quienes viven con dolor crónico.
“Una de las mejores terapias contra la depresión es el ejercicio. El dolor y la depresión van de la mano: si emocionalmente estás deprimido, el dolor se vuelve más intolerante”, sostuvo.
A los pacientes que temen hacer ejercicio debido a su enfermedad, el doctor les recordó que son muchas más las personas mayores que presentan limitaciones por más falta de movimiento que por daño a una articulación.
“Hay gente que no tiene piernas y escala montañas y nosotros nos ponemos límites. Si no puedes caminar siempre hay una piscina, una playa. Vivimos en el trópico, donde el clima siempre es favorable. Si no podemos hacer piernas, podemos hacer brazos, bicicleta. El ejercicio es vital”, aseguró.
Asimismo, una de las claves del buen pronóstico es detectar las enfermedades temprano. Pero ¿qué síntomas deben encender las alarmas? Doctor Gago mencionó tres: cansancio persistente, fiebre ocasional y dolores musculares o articulares incapacitantes.
Dolencias que “no se sueltan” cuando se camina, necesidad de ayuda para levantarse o dolor que limita las actividades diarias pueden ser indicadores de enfermedades inflamatorias.
En todo caso, la primera parada debe ser el médico primario. “Hay pacientes que si les duele una articulación van directo al ortopeda. Empieza por tu médico primario, discútelo con él”, recomendó.
Aunque la enfermedad reumatológica no desaparece, sí puede controlarse. Se trata de un balance entre ciencia, movimiento, buena alimentación, salud emocional y autocuidado.
La autora es periodista colaboradora de Puerto Rico Saludable.

Este contenido comercial fue redactado y/o producido por el equipo de GFR Media.


