Tras recibir un diagnóstico de infección de transmisión sexual (ITS), las personas temen a despedirse de su vida íntima o, en el mejor de los casos, creen que no disfrutarán de estos encuentros como lo hacían en el pasado.

Sin embargo, especialistas coincidieron en que, si se priorizan el diálogo informado entre parejas y la prevención, las ITS no deben perjudicar las relaciones sexuales de quienes enfrentan este tipo de diagnóstico.

“Ya no hay que abstenerse. Lo importante es darse cuenta a tiempo de la condición, que ambos miembros de la pareja estén informados y que se tomen medidas para evitar la transmisión”, explicó la presidenta del Instituto Sexológico, Educativo y Psicológico (ISEP), Alicia Fernández Villanueva.

Las ITS pueden ser virus, bacterias o parásitos que se transmiten entre personas, por el contacto directo de los genitales durante el coito, el intercambio de fluidos o ciertas fricciones físicas.

En 2018, última fecha en que el Departamento de Salud presentó datos relacionados a estas infecciones, se reportaron 5,942 casos de clamididia, de los que el 80% eran mujeres. Mientras, se informaron 557 diagnósticos de gonorrea (63% hombres) y 1,080 casos de sífilis.

En cuanto al virus de inmunodeficiencia humana (VIH) y al sida, hasta enero de 2021, 3,637 residentes en el archipiélago se encontraban atravesando estas condiciones. De acuerdo con datos de la agencia salubrista, el 60% de los diagnósticos de VIH o sida han culminado en muertes.

“Pensar que las personas homosexuales son las únicas que pueden contagiarse con ITS es completamente falso. Nadie está exento de contraer una infección de esta naturaleza, desde los adolescentes hasta los adultos mayores. Toda persona que tenga intimidad sexual corre riesgo de contraer una ITS, si no toma las precauciones necesarias”, señaló la sexóloga clínica.

¿Cómo evitar la transmisión?

Las recomendaciones para evitar las transmisiones varían de acuerdo con los diagnósticos.

Según el ginecólogo obstetra Sadiasept Guillont Juarbe, en el caso de la clamidia y la gonorrea, aunque se pueden utilizar profilácticos durante el coito, la incomodidad- y en ocasiones dolor- que provocan estas condiciones limitan el placer en el encuentro. Asimismo, recomendó evitar las actividades sexuales hasta que se trate la sífilis.

“Yo te puedo curar, pero, si vuelves a tener sexo y tu pareja no se trató, te contagias nuevamente. Lo ideal es que se curen para reanudar el sexo”, sostuvo el también médico de la Clínica Prevén de San Juan, entidad que provee servicios de salud sexual y reproductiva para la prevención de embarazos e ITS.

Sobre el virus del papiloma humano (VPH), el especialista indicó que la persona en la pareja que no sea positiva a la afección podría vacunarse. Asimismo, señaló que existen medicamentos para prevenir que personas VIH negativas contraigan la infección al tener encuentros sexuales con personas VIH positivas.

Más allá de la penetración vaginal

Se ha concluido, incorrectamente, que estas infecciones no se transmiten mediante el sexo anal u oral. Guillont Juarbe puntualizó que las ITS se propagan a través de las secreciones presentes tanto en la vagina o en el pene, como en la boca.

“Por otro lado, en el sexo anal, por su naturaleza, hay más fricción, lo que puede provocar un microsangrado que dé la entrada a la infección”, agregó.

Por tanto, recomendó el uso de preservativos genitales y bucales. No obstante, subrayó que la efectividad de los condones dependerá de si son utilizados correctamente.

Según la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, en inglés), los profilácticos para vaginas y penes tienen 94 y 98.5% de efectividad para prevenir el VIH, respectivamente. En cuanto a otras ITS, esta eficacia ronda entre el 66 y el 75% en ambos preservativos.

La honestidad inicial

Para Fernández Villanueva, los estigmas sociales provocan que las personas con ITS enfrenten miedos a la hora de informarle, a una pareja estable u ocasional, que están atravesando por algún tipo de condición.

Sin embargo, más allá de la obligación legal de notificar a la otra persona, la honestidad sobre la vida sexual es indispensable para evitar la presencia de más de una ITS durante el encuentro. De lo contrario, las afecciones podrían empeorar, causando desde la esterilidad hasta la muerte.

Si una pareja nueva se va a establecer, ambos deben hacerse las pruebas de detección de ITS. En el caso de que se vaya a tener relaciones con alguien ocasionalmente y esta otra parte mantenga relaciones con otras personas, de igual forma, se debe solicitar esta prueba”, dijo la también educadora sexual.

Por otro lado, Fernández Villanueva destacó que, debido a las diversas formas en que se pueden transmitir estas infecciones, la instrucción sexual es indispensable.

“En las relaciones íntimas sexuales, el coito es parte de, pero no lo es todo porque, dependiendo de cuál sea la ITS y el diagnóstico de la pareja, se pueden dar caricias, abrazos, besos, sexo anal u oral”, precisó.