El productor Sixto Jorge Díaz Colón, mejor conocido como Sixto George, guardó silencio durante el receso del mediodía de este viernes, luego de que el juez federal Francisco Besosa lo regañara públicamente por hacer expresiones a la prensa y le advirtiera que en una próxima vez le revocaría la fianza.

Su abogado Ricardo Castro Lang, sin embargo, explicó a los periodistas la razón por la que su cliente contestó preguntas en los pasados días, a pesar de que existe una orden de mordaza en el juicio federal que se sigue en su contra por extorsión.

“Yo le he dicho que no hable con la prensa. Pero, ustedes siempre están encima de él. Y él se excita y se pone a hablar. Pero él no debe. Y yo le pido a ustedes de favor...”, afirmó el abogado, durante el receso del almuerzo.

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Un periodista le recalcó que hay un trabajo de hacer preguntar y que Díaz Colón es el que tiene la opción de no responder. De inmediato, Castro Lang expuso que “yo lo sé. Pero, es que mira todo esto. La gente, a veces, se excita y habla”.

El segundo regaño del juez ocurrió por una extensa entrevista que concedió Díaz Colón ayer, jueves. Entre otras cosas, relató que tres agentes del Negociado Federal de Investigaciones (FBI, en inglés) lo “entramparon” para que se comunicara telefónicamente Raúl “Raulie” Maldonado Nieves y le ofreciera $300,000 para que no divulgara chats adicionales que implicasen al exgobernador Ricardo Rosselló.

Además, lanzó acusaciones contra el testigo principal en el juicio en su contra, el exsecretario de Asuntos Públicos bajo la administración de Rosselló, Anthony Maceira Zayas. Alegó que este le dio a una empresa información privilegiada de la Autoridad de Puertos para que lograsen un contrato.

Díaz Colón también contó que para la fecha en que Maceira Zayas le imputó haberlo extorsionado, entre el 20 de junio al 16 de julio de 2019, el comité de campaña de Rosselló le concedió un contrato verbal para mejorar la imagen del exmandatario por $300,000.

El productor fue acusado en enero de 2021 por extorsión, intento de extorsión y destruir o alterar récords en medio de una investigación federal, en relación al chat de Telegram que causó protestas contra la administración de Ricardo Rosselló.