El Instituto de Ciencias Forenses (ICF) culminó hoy el análisis preliminar del vehículo con el que presuntamente fue atropellado Santiago Márquez Ortiz, de 56 años, por una conductora que se dio a la fuga durante la madrugada del 13 de abril en Miramar. 

El director de la División de Agresiones del Cuerpo de Investigación Criminal del área de San Juan, sargento Félix J. Mateo, indicó que los investigadores del ICF le realizaron varias pruebas al vehículo, entre ellas de ADN de las muestras de tejidos, fluidos como sangre y cabello que estaban incrustadas en cristales y carrocería. 

En la escena se recuperó el emblema que se cree pertenece al vehículo, pedazos de la parrilla y de pintura, los cuales serán sometidos a un análisis comparativo. 

La evidencia fue enviada a un laboratorio en los Estados Unidos para la comparación de las piezas del vehículo ocupadas en la escena con las del automóvil marca Volkswagen Jetta del año 2001, que fue ocupado el pasado 19 de abril en horas de la madrugada en una residencia en la urbanización Colinas de Monte Carlo, en Rio Piedras, para certificar que se trata del mismo con el que fue atropellado el peatón. 

Según el sargento Mateo, al momento de localizarse, el vehículo estaba protegido bajo techo, lo que actuó a favor de los investigadores forenses, ya que se preservó parte de la prueba que es fundamental para el esclarecimiento del caso y la radicación de las acusaciones correspondientes.

Se observaba el cristal frontal roto y abolladuras en la carrocería. 

“Ahora vamos a realizar otro peritaje adicional, tenemos a un perito que nos va a certificar el funcionamiento del vehículo, si tenía la capacidad para frenar, si le funcionaban las luces, entre otros aspectos”, observó el sargento, tras confirmar que el vehículo ya está en su custodia. 

Además, se busca a otro experto para que establezca la velocidad a la que posiblemente transitaba la conductora, que fue identificada por las autoridades como Kiara Félix Comas, de 22 años, al momento que fue atropellado el empleado de mantenimiento. 

Estos análisis podrían estar listos a finales del mes de mayo. 

La investigación también ha revelado que Félix Comas estuvo compartiendo en Puerto Nuevo con amistades y luego varios de ellos decidieron ir a comer a un restaurante cercano al lugar de los hechos. Sobre este ángulo, detalló Mateo, se encuentran trabajando para analizar cámaras de seguridad que les ayuden a establecer la ruta tomada. 

También trabajan para la identificación de la persona que la acompañaba esa madrugada. El automóvil es propiedad de la hermana de Félix Comas, de 27 años, pero ella declaró en la fiscalía que se lo había cedido a la sospechosa, que compareció el 20 de abril ante las autoridades pero por instrucciones de sus abogados no hizo expresiones sobre los hechos. 

El caso se esclareció mediante las confidencias recibidas de la ciudadanía cuando la Policía divulgó las fotos y vídeos del incidente. 

En uno de los vídeos se observa cuando el automóvil impacta al peatón y su cuerpo queda tendido en el pavimento de la Avenida Ponce de León, mientras la conductora continúa la marcha. Segundos después se ve personas que acuden a socorrer al peatón y llega una ambulancia al lugar. 

Otras imágenes del incidente también muestran a la mujer corriendo desde un estacionamiento en la parte posterior de un edificio aledaño, hasta llegar cerca de la escena de los hechos mientras conversaba por su celular. Luego, regresa a su vehículo donde le acompañaba otra persona con quien habla. 

Los investigadores también laboran para establecer la identidad del pasajero del automóvil, agregó el sargento Mateo.

Las nuevas enmiendas a la Ley de Tránsito disponen que si un peatón muere atropellado por un conductor que huyó de la escena, el responsable se expone a una pena de ocho años de cárcel fija, sin derecho a probatoria, en caso de ser encontrado culpable.