El  gobernador Alejandro García Padilla   lució impecable con su elegante vestimenta , proyectando una imagen de éxito y poder durante su mensaje sobre la situación del País, pero fue insultante, utilizando expresiones derogatorias, al referirse a los legisladores que le colgaron el proyecto de reforma.

De otra parte, llamó la atención que durante la presentación de los alcaldes, parece que  “se le olvidó” al presidente de la Cámara, Jaime Perelló, mencionar a la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz.

Esto es parte del análisis de la experta en imagen, Helga García y  el  analista político y empresario, Adolfo Krans.

Krans comentó con cierto cinismo que  el montaje tradicional del mensaje de la situación  del País tuvo un elemento muy positivo, que es que solo duró 36 minutos .

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“Se vio la animosidad del Gobernador   con los legisladores que no acataron el caucus.  El Gobernador amenazó, insultó con  expresiones como flojos de espíritu, reclamó valentía implicando cobardía y modificó su expresión de hace dos años, de “a mí me vale”, cuando se refirió a las agencias acreditadoras, reafirmando  que procedería a Gobernar por decreto si la Legislatura no avala lo que va a proponer”, dijo Krans .

El empresario observó que García Padilla ciertamente no fue específico en su propuesta, primero,  de recabar recursos, para enfrentar las exigencias presupuestarias.

“Habló de reestructurar la rama ejecutiva dando la encomienda  a dos inexpertos en reestructuración, que lo son el secretario de la Gobernación y el secretario de Estado”, comentó.

No mencionan a Carmen Yulín Cruz

Krans repitió que “en  36 minutos, el sufrimiento no fue mucho”.

“Un comentario al margen me llamó mucho la atención que el presidente de la Cámara mencionó por pueblos, a  los alcaldes presentes y no mencionó a la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz. No quisiera pensar que la felicitación que recibió por parte del Gobernador,  fuera por eso. Por haber excluido de mención a la alcaldesa de San Juan”, recalcó.

“Esperaría que algo responsable se radique para sustituir el proyecto que no se aprobó, que sea sencillo, de acción inmediata, que le genere ingresos adicionales al Gobierno  para asumir  la responsabilidades que tiene cotidianas, de inmediato y largo plazo”, acotó.

Pasó la prueba

Para la experta en imagen, Helga García, al margen del contenido del mensaje que “será interpretado según el criterio de cada cual, en términos de proyección de imagen, García Padilla pasó la prueba.

“El Gobernador seleccionó una corbata color vino que combinada con una camisa blanca demuestra una imagen de poder, vistió un traje color azul marino que se relaciona con el éxito. La combinación de colores nos proyectó a un Primer Ejecutivo decidido a enviar un mensaje contundente pero conservador”, dijo.

En cuanto a su lenguaje corporal, comentó, que  al inicio del discurso, reveló cierto cansancio y algo de estrés.

“No obstante, en la medida que fue avanzando, su proyección se fue consolidando hacia una de mayor seguridad y empoderamiento. Durante todo el mensaje, salvo alguna equivocación en el juego de palabras, García Padilla logró el control de la audiencia”, apuntó.

“A través de sus 36 minutos de alocución, lo vimos levantar su rostro asumiendo una postura de poder, indicativo de que estaba en absoluto convencimiento de lo que nos estaba comunicando. El tono de voz, el ritmo y el volumen de sus palabras por momentos lo traicionaron, aún así, se compuso con rapidez y proyectó una firmeza y seguridad que no habíamos percibido en mensajes anteriores”, afirmó.

Sobre el lenguaje no verbal, García, comentó que en ocasiones ahorró palabras y enfatizó  la expression “la posición que defendemos”.

“Fue  muy bien estudiado. El Gobernador decidió que menos es màs. Los gestos que revelan su estado emocional a través del uso de las manos estuvieron presentes cuando fue necesario. Erguido y con gallardía se mantuvo firme detrás del podio y nos envió una proyección de seguridad”, puntualizó.