Washington.- El polémico aspirante a la candidatura presidencial republicana Donald Trump llamó hoy a uno de sus rivales de partido, el senador por Carolina del Sur Lindsey Graham, "idiota" y reveló su número de teléfono privado, inundándole de llamadas.

El magnate inmobiliario, que ha llamado a los inmigrantes mexicanos "violadores", no moderó hoy su discurso tras las recientes críticas de sus rivales republicanos y criticó a Graham por llamarle "jackass" (imbécil) y dijo que el senador es un "idiota" en un evento celebrado en su propio estado, Carolina del Sur.

"No parece un tipo muy brillante. Probablemente no sea más brillante que Rick Perry (exgobernador de Texas y otro aspirante republicano a la Casa Blanca). Puede que hasta Perry sea más inteligente que Lindsey Graham", añadió.

Relacionadas

Trump contó que Graham le "rogó" ayuda para que hablarán bien de él en un programa del canal conservador de noticias Fox News y que le dio su número de teléfono.

A continuación, el magnate de 69 años leyó el número de teléfono del senador y conminó a la audiencia: "Inténtenlo".

El senador Graham confirmó al diario Político que su teléfono se inundó de llamadas y lamentó que Trump, con sus salidas de tono, esté desviando la atención de asuntos legislativos y de política nacional verdaderamente importantes.

Graham había criticado a Trump por haber puesto en duda este domingo que el senador John McCain, candidato republicano a la Presidencia en 2008, fuera un héroe de guerra.

En el mitin de hoy, Trump se refirió de nuevo a sus declaraciones sobre México y aseguró: "Tengo mucho respeto por México y mucha gente va por ahí diciendo que no me gusta México, pero yo amo México".

"Amo a los mexicanos. Tengo millones de mexicanos trabajando para mí. Vendo apartamentos por millones de dólares a mexicanos. Los amo y ellos me aman a mí", continuó Trump con sus expresivas gesticulaciones.

"Soy el único que va a ganar el voto hispano", aventuró Trump, quien explicó que lo hará trayendo a Estados Unidos servicios que han sido externalizados a China, Japón y México.